Conocer, sentir y soñar el bosque nativo

Un valor del bosque nativo es su belleza, y las sensaciones positivas que produce recorrerlo o descansar a su sombra...Si a lo anterior añadimos la singularidad del bosque templado húmedo del sur de Chile, también llamado selva fría, se crea una experiencia única y auténtica. Disponemos de tres propuestas para sumergirnos en el bosque, sentirlo y conocerlo:


1) Conocer.Visitas botánicas y de ecología forestal

El refranero popular nos dice: “No se puede amar lo que no se conoce, ni defender lo que no se ama”. Buscamos: i) Enseñar con un paseo guiado, recorrer el bosque y mostrar las principales especies de árboles, helechos y plantas trepadoras. ii) Acercar al visitante a los ejemplares singulares por su tamaño, forma y edad. iii) Explicar el funcionamiento del bosque, y como se relacionan los árboles entre si para crear ese super organismo llamado bosque, que es mucho más que la suma de los árboles. Finalmente, visitar la reserva integral de bosque primario, con un bosque siempreverde y un tepual (bosque pantanoso) que se han mantenido intactas desde siempre, sin intervención humana.

2) Sentir. Shinrin Yoku-Baños de bosque

Para los que quieran poner el énfasis en las sensaciones, se pueden realizar baños de bosque. Pasear por el bosque centrándose en los sentidos y en las sensaciones, para dejar de lado la parte mas racional y mental que en el cotidiano nos rodea. Sin patallas ni teclados, sin prisas, sin espectativas, simplemente sintiendo y dejando que el bosque trabaje en nuestro estado de ánimo y cuerpo.



3) Soñar. Camping libre + concierto de ranas

Para los más aventureros, se abre otra posibilidad. En alguno de los claros del bosque, localizaciones estratégicas, se pueden instalar con carpa, para pasar la noche, una sola carpa por claro. La llegada de la noche, la oscuridad con una fogata, el bosque con los cantos de las aves nocturas, y lo mas particular de todo, los cantos de las ranas arborícolas. Hay 4 especies identificadas: Rana de antifaz, rana moteada, rana de hojarasca de párpados verdes y rana de hojarasca austral. Es en la noche cuando estas importantes poblaciones de ranas arborícolas salen a cantar: cantos amor y de territorialidad. Un concierto natural dificil de olvidar.